miércoles, 1 de octubre de 2008

Charl(orr)ando

Cuántas veces disfrutamos del grato sabor que dejan las buenas charlas. De eso se trata. La Charlorra es una especie de conversación grata sobre temas serios; pero sin tapujos. El invitado cómplice (no hay otra, aquí no obligamos a nadie) puede venir en corbata o con sombrero de chamarra: igual lo escucharemos porque estamos invitados a pasarla bien alrededor de un buen tema, ese que a veces se nos queda apretujado de tanto dejarlo para más tarde. Ya es la hora: todos los primeros martes de cada mes, estaremos en La Chistorra pasándola bien, confundiendo quizás la gimnasia con la magnesia. Aunque hablando se entiende la gente.



La Charlorra iniciará el martes 07 de octubre con Alejandra Melfo.

Ale es amiga y licenciada en física. Tiene encima una maestría en astrofísica. En 1997 obtuvo su PhD en Astrofísica en el Internacional School for Advanced Studies, en Trieste, Italia. Es profe del Departamento de Física de la Universidad de los Andes y ha sido Directora de Física Fundamental de esa misma Universidad y Miembro del Consejo del Departamento de Física de la Facultas de Ciencias de la ULA. Le gusta tejer, es aventurera y cómplice de las grandes y pequeñas buenas ideas.

La Charlorra:
Large Hadron Collider y el fin del mundo


Alejandra estará charlorrando sobre el Gran Colisionador de Hadrones (en inglés Large Hadron Collider o LHC, siglas por las que es generalmente conocido), el más grande acelerador de partículas, en cuya construcción han participado cerca de dos mil físicos de 34 países y cientos de universidades y laboratorios, con un costo estimado de 6.4 millardos de EUROS.
A la par de las expectativas y controversias científicas, este experimento asoma la idea (¿ligera?) de una posible formación de un pequeño agujero negro. ¿Fin del mundo? Ya nos contará Ale.

Resumen:

El 10 de septiembre de 2008 no se acabó el mundo, tragado por un hueco negro producido en las entrañas del recién inaugurado gran acelerador de hadrones (LHC). Pero todavía hay chance, porque el LHC aún no ha producido las primeras colisiones de protones a velocidades espantosas con energías jamás vistas, explorando dominios de la física hasta ahora ocultos y por ende desconocidos. Así que nos preguntaremos (y
responderemos): ¿de qué se trata este nuevo anuncio del apocalípsis? ¿Es de verdad más científico que los demás? ¿Qué es esa máquina infernal? Para qué sirve? ¿Cuánto cuesta? ¿Vale la pena? ¿Y cuál es el riesgo real de que la curiosidad mate a todos los gatos del Universo?

Sobre el tema:
¿Qué es el colisionador de partículas?

1 comentario:

Raisa Urribarri dijo...

¡Qué maravilla! Obligado es pasar el páramo para no perderse estas sabrosas conversas.