Empezamos
el año siguiéndole las huellas a un dinosaurio. Nuestro
cómplice, Ascanio Rincón, jefe del Laboratorio de Paleontología del IVIC, nos
contará cómo circulaba por nuestras tierras el Tachiraptor admirabilis hace millones de años. Un ser carnívoro y de los pocos que llegó a
sobrevivir a la extinción del triásico-jurásico, así nos lo presenta Rincón,
nuestro invitado del mes. Esperamos, pues, seguirle los pasos a esta especie
dueña de nuestras tierras en tiempos lejanos.
La
Charlorra
Por muchos años se especuló que Venezuela no tenía registros de
dinosaurios, por lo que se pensó que Pangea Central hace 200 millones de años
fue un ambiente desértico y que sería muy posterior a la ruptura de este
supercontinente cuando el territorio que hoy ocupa nuestro país pudo tener alta
biodiversidad. En 1992 un grupo de paleontólogos franceses y venezolanos
reportó por primera vez para los Andes de Venezuela restos de dinosaurios
herbívoros, pero no sería hasta 2014 cuando se analizaran más restos de este
dinosaurio para finalmente concluir que se trataba de una nueva especie para la
ciencia, bautizada como Laquintasaura venezuelae, un dinosaurio
herbívoro del principio del Jurásico; pero ese mismo año un grupo de
investigadores del IVIC en conjunto con la Universidad de Sao Paulo, encontró
restos de otro dinosaurio que sería nombrado como Tachiraptor
admirabilis, el primer dinosaurio carnívoro del Norte de América del Sur y
de Pangea Central. En esta Charlorra se nos presentará el testimonio del Tachiraptor admirabilis, considerado el
primer dinosaurio carnívoro de Venezuela y uno de los pocos que sobrevive a la
extinción del triásico-jurásico en el mundo.